Prime Capital. Las oficinas de inversión deben generar una buena identidad desde el principio. No fue extraño que el primer contacto con sus ejecutivos solicitan una imagen que reflejara una confianza y sencillez como primer elemento en la construcción de la marca. Canadá guarda este concepto muy bien ya que como potencia económica e industrial tiene una imagen que es el reflejo del trabajo de su gente. Así el resultado de la construcción de la marca Prime Capital fue exacto. Para L’ALL el diseñar esta marca fue un gran solución desde el punto de vista estético y comercial. Sus ejecutivos también lo resolvieron así. Un símbolo sencillo, lleno de alegoría y que conecta la base de toda inversión que es la confianza. La oficina de Prime Capital en Toronto generó conexión desde el primer momento con esta identidad y así la llevó a una marca canadiense fuera de sus mercados.